En mi casa siempre hubo sartenes y planchas con antiadherente. Y debido a las malas costumbres (rallar el fondo cortando la carne en la sartén, o limpiarlas con lana de acero) siempre terminaban perdiendo la protección y pegándose la comida (además de coger un gusto raro los alimentos). Y tan poco servía lavarlas con esponjas suaves porque en pocos años se pegan los alimentos igualmente, y para quitar los restos de comida pegada tienes que raspar y dañar el teflón. Yo estaba muy harta de comprar y tirar sartenes y planchas. Y para colmo hace dos años vi documentales sobre los tóxico y contaminante que es el teflón (el recubrimiento antideslizante de las sartenes y planchas modernas)... Y pensé ¿Si los bisabuelos cocinaban en sartenes de hierro y acero porque nos complicamos tanto la vida ahora? Es lo que tienen los falsos avances tecnológicos.
Así que en cuanto se ha estropeado la plancha con teflón, de apenas 4 años, la he tirado a reciclar y, en contra de las dudas de mi pareja, he adquirido una plancha con cuerpo de acero y mango de aluminio (https://habitium.com/es/sartenes/558356-plancha-para-cocina-de-acero-inoxidable-de-triple-cuerpo-con-mango-26-cm-19-l-grano-tramontina.html)... Y me he quedado como una reina:
Con calor medio o bajo cocina los alimentos mejor que las de teflón (ahorras energía).
Las comidas saben y sientan mejor, lo digo como paciente que sufre sensibilidad e inflamación en el aparato digestivo.
Y después de cocinar añado a la plancha un poco de agua y vinagre económico de vino blanco. Lo dejo reposar mientras como, y cuando la friego con la esponja de lufa, el lavavajillas y agua templada... Sale la suciedad sola, aunque se haya pegado la comida o quemado un poco mientras cocinaba.
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