Vi esta receta en Internet (https://www.youtube.com/watch?v=7aZaIOjhEpU)
y me encapriché, pero por el camino hemos ajustado cantidades, y la hemos
quitado algunos ingredientes en nuestro afán por los sabores auténticos. Es una
receta adaptable a otras frutas, y ligera.
Primera fase: Empezamos a hacer el bizcocho echando en un bol alto 6 huevos grandes que estén a temperatura ambiente. Después con las varillas empezamos a batir los huevos a velocidad baja, hasta que comiencen a hacer espuma, después añadiremos 150 gramos de azúcar y 65 gramos de azúcar de caña. Y seguimos batiendo hasta que los huevos queden a punto de letra (hasta que tripliquen su tamaño y quede al punto antes del merengue). A continuación, rallamos 200 gramos de zanahoria en laminitas que cortaremos para acortarlas. Luego tamizamos 240 gramos de harina de poco en poco para ir integrando la harina con los huevos sin batir demasiado, con movimientos envolventes, y finalmente agregaremos la zanahoria rallada con esos mismos movimientos hasta mezclarlo todo bien, procurando que la masa no baje su volumen.
A continuación, en un molde de 20 cm de diámetro ponemos en el fondo papel de horno y vertemos nuestra mezcla de bizcocho y lo llevamos al horno precalentado previamente a 180 grados Centígrados, con calor arriba y abajo durante aproximadamente 35 o 40 minutos, sacamos del horno y dejamos enfriar.
La segunda fase: Para hacer el confitado de manzana necesitaremos 500 gramos de manzanas cortadas en daditos pequeños, ponemos estas en una cazuela y calentamos todo a fuego medio, echamos 20 ml de agua, 60 gramos de azúcar de caña y mezclamos bien. Pasados 5 minutos añadiremos canela en polvo al gusto y zumo de medio limón, y seguiremos cocinando a fuego medio hasta que la fruta este blandita y se haya hecho un almíbar. Entonces, retiramos del fuego y dejamos enfriar.
Ahora es el turno de la crema de queso: para ello en un bol batiremos 200 ml de nata de montar, pero no la llegaremos a montar del todo, una vez este espesita, agregaremos 400 gramos de queso crema, 65 gramos de azúcar glace y zumo de medio limón. Y seguiremos batiendo a velocidad baja hasta que se integren los ingredientes y resulte una crema espesa y ligera.
Por último es el momento de empezar a montar la tarta, la última fase. Con el bizcocho ya frio lo partimos en 3 lonchas aproximadamente de 1 cm cada una. Colocamos en un plato la primera loncha de bizcocho (la de la parte de abajo), la cubrimos con un poco de crema de queso y nata haciendo un poco de borde en los laterales. Después agregaremos otra cantidad de relleno de manzana confitada, todo ello teniendo en cuenta que tiene que llegarnos para las 3 lonchas de bizcocho. Así capa a capa hasta terminar coronando la tapa de la tarta con manzana y crema de queso por franjas o como más os guste. Una vez puestos todos los ingredientes en su orden extendemos una capa fina de crema de queso y nata a modo de cobertura por los laterales. Y ya tan solo hay que meter la tarta al frigorífico durante 2 horas antes de consumirlo para que adquiera rigidez la crema.
Primera fase: Empezamos a hacer el bizcocho echando en un bol alto 6 huevos grandes que estén a temperatura ambiente. Después con las varillas empezamos a batir los huevos a velocidad baja, hasta que comiencen a hacer espuma, después añadiremos 150 gramos de azúcar y 65 gramos de azúcar de caña. Y seguimos batiendo hasta que los huevos queden a punto de letra (hasta que tripliquen su tamaño y quede al punto antes del merengue). A continuación, rallamos 200 gramos de zanahoria en laminitas que cortaremos para acortarlas. Luego tamizamos 240 gramos de harina de poco en poco para ir integrando la harina con los huevos sin batir demasiado, con movimientos envolventes, y finalmente agregaremos la zanahoria rallada con esos mismos movimientos hasta mezclarlo todo bien, procurando que la masa no baje su volumen.
A continuación, en un molde de 20 cm de diámetro ponemos en el fondo papel de horno y vertemos nuestra mezcla de bizcocho y lo llevamos al horno precalentado previamente a 180 grados Centígrados, con calor arriba y abajo durante aproximadamente 35 o 40 minutos, sacamos del horno y dejamos enfriar.
La segunda fase: Para hacer el confitado de manzana necesitaremos 500 gramos de manzanas cortadas en daditos pequeños, ponemos estas en una cazuela y calentamos todo a fuego medio, echamos 20 ml de agua, 60 gramos de azúcar de caña y mezclamos bien. Pasados 5 minutos añadiremos canela en polvo al gusto y zumo de medio limón, y seguiremos cocinando a fuego medio hasta que la fruta este blandita y se haya hecho un almíbar. Entonces, retiramos del fuego y dejamos enfriar.
Ahora es el turno de la crema de queso: para ello en un bol batiremos 200 ml de nata de montar, pero no la llegaremos a montar del todo, una vez este espesita, agregaremos 400 gramos de queso crema, 65 gramos de azúcar glace y zumo de medio limón. Y seguiremos batiendo a velocidad baja hasta que se integren los ingredientes y resulte una crema espesa y ligera.
Por último es el momento de empezar a montar la tarta, la última fase. Con el bizcocho ya frio lo partimos en 3 lonchas aproximadamente de 1 cm cada una. Colocamos en un plato la primera loncha de bizcocho (la de la parte de abajo), la cubrimos con un poco de crema de queso y nata haciendo un poco de borde en los laterales. Después agregaremos otra cantidad de relleno de manzana confitada, todo ello teniendo en cuenta que tiene que llegarnos para las 3 lonchas de bizcocho. Así capa a capa hasta terminar coronando la tapa de la tarta con manzana y crema de queso por franjas o como más os guste. Una vez puestos todos los ingredientes en su orden extendemos una capa fina de crema de queso y nata a modo de cobertura por los laterales. Y ya tan solo hay que meter la tarta al frigorífico durante 2 horas antes de consumirlo para que adquiera rigidez la crema.
Nos encantó lo buena que quedó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario