Para empezar a hacer los canelones troceamos: en tacos media pechuga de pollo entera, 200 gramos de carne de ternera, 2 tiras gruesas de panceta sin adobar, 4 salchichas de cerdo (estas las dejaremos enteras, no hace falta trocearlas). Sellamos las carnes en aceite bien caliente para que la carne conserve todo su sabor y agua, y una vez selladas, sin cocinar del todo, las retiramos y reservamos en un plato.
Después cortamos en juliana 2 cebollas pequeñas, las pochamos bien en el mismo aceite que hemos usado para la carne, junto con 2 hojas de laurel y pimienta molida.
Una vez pochada la cebolla añadimos una cucharada de harina y la cocinamos bien. Luego agregamos 150 gramos de foie gras, en este caso usamos uno de calidad media. Removemos un poco y añadimos las carnes que habíamos sellado al principio, después vertemos 500 ml de nata y a fuego medio dejamos cocinar hasta que la nata reduzca mucho y se evapore completamente. Cuando haya reducido añadimos 3 cucharaditas de coñac o brandy.
Ahora sacamos las carnes y la cebolla, y trituramos todo junto con una picadora o batidora para así dejar hecha la masa de los canelones, y reservamos.
Empezamos a cocer la pasta de los canelones, en este caso usamos canelones de "Gallina blanca" que hay que cocer durante 10 minutos en abundante agua con sal. Una vez cocidas las placas de los canelones las vamos sacando, colocando y cubriendo sobre unos paños húmedos para que no se sequen. A continuación preparamos la bechamel: para ello usamos 80 gramos de mantequilla y la ponemos a calentar en una cazuela a fuego medio. Acto seguido añadimos 80 gramos de harina que iremos mezclando con la mantequilla con ayuda de unas varillas o una espátula. Cuando hayan transcurrido 3 minutos añadimos un poco de caldo de carne caliente y medio litro de nata con un toque de nuez moscada, sal y pimienta, cocinando la bechamel hasta que reduzca y espese (durante 20 minutos aproximadamente). Pasado ese tiempo retiramos del fuego y reservamos también.
Y ahora por fin llegó la hora de rellenar los canelones, con la cantidad justa para luego poder cerrarles, vamos enrollando y colocando en una fuente de cristal para horno con el fondo untado de salsa de tomate, (nosotros usamos la marca "Jarry"). Y así vamos rellenando y colocando hasta que no tengamos más placas de canelón para rellenar. Ya tan solo tenemos que cubrir bien los canelones con la bechamel y después rallamos queso semicurado suave por encima. Por último metemos la fuente en el horno a gratinar durante 10 minutos y ¡listo para comer!